Un triste imitador

Llámenme triste imitador, copión, lo que sea. Pero hoy me quite la venda de los ojos y vi por fin que no soy el único que cree que la soledad es su refugio. Lo que no me debería sorprender, ya que somos tantos en el mundo que no es raro que algunos sintamos lo mismo, pero es la intensidad con la que se siente la que marca la diferencia. Por esa razón, es que me diferencio del resto, por la que todos somos diferentes. Con esto no trato de decir que yo siento más o menos que los demás solo trato de decir que la manera en la que me afecta a mí, no es la misma con la que afectaría a alguien más. En fin, seguiré escribiendo las tonteras aburridas que se me pegue en gana, y a ver si alguien esta tan aburrido como para leerlas.